A lo largo de los años, he hecho varias recetas de helado con la misma técnica, es decir, sin utilizar heladera. Tal como los hago, no quedan cristales de hielo y resultan muy, pero que muy cremosos. Algunos ejemplos de esto son el helado de fresa, el helado de turrón, el helado de queso con frutos del bosque y el helado de arroz con leche. Este último es una receta de aprovechamiento, aunque recomiendo retirar un poco de arroz con leche la próxima vez que hagáis porque, afrontémoslo, es muy difícil que sobre arroz con leche.
Podemos considerar este helado de limón una receta para principiantes. Al no requerir una técnica complicada ni ingredientes inaccesibles, cualquiera en su casa puede prepararlo y le va a salir bien. Lo único con lo que hay que tener un poco de cuidado, es con que no se nos pase la nata al montarla. Controlando eso, no deberíais tener ningún problema.
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